He Vuelto y soy millones (de deudas)

01/10/2018 - 10:30:00 por Fabio Baccaglioni - 6303 - 10 - En Turismo

Y aquí estoy luego de unas extensas pero necesarias vacaciones, una época demasiado "activa" para irse de vacaciones, siempre pasa de todo, pero como apunté a una latitud que no da para visitar en nuestro verano, mejor así.

No, no me amargué por las "cositas" que pasaron en el país estos días, sencillamente decidí no hacerme demasiado problema aunque después comerme una hamburguesa me costara un ojo de la cara pero vamos, a laburar que es lo que hay que hacer para tener el siguiente.

¿Qué hice? ¿A dónde fui? Como siempre que vuelvo hago como un mini repaso para aquellos que tienen curiosidad y, de paso, para tirar algunos tips de lo que vi. Luego habrá notas en el blog de Gimena donde detallará cada cosa, pero hay algunas que voy a publicar acá también, ahora les cuento...

Bueno, primero que nada este era mi viaje aniversario, cumplí 40 años y me merecía algo para "festejar" y no deprimirme por la vejez así que un viajecito a los EEUU (costa este) y Canadá (mi primera vez allí) podría, tal vez, aplacar la pesadez de la ancianidad.

Inicialmente no teníamos un plan claro pero como quisimos visitar a un amigo, Albert, que está en Canadá se lo agregamos al viaje. Por otra parte quería conocer un par de lugares que tenía pendientes: Washington DC y Boston. Son los más relevantes de la costa este más allá de New York y Miami, así que eran el objetivo inicial.

Con lo de Canadá se me sumó Montreal y ¿Por qué no? Québec, de ahí Toronto y las Cataratas del Niágara eran opción. Si, como se imaginarán la cosa se extendió más de lo necesario, pero como uno nunca sabe cuándo podrá volver a viajar hay que hacer full-in y darle aunque en vez de descansar estés corriendo de lugar en lugar (cosa que obviamente terminó sucediendo).

La llegada fue a New York en un día caluroso como la mierda, los que creen que todo es película invernal de comedia o romance no tienen idea de lo que es el calor en esa ciudad durante el verano, es Buenos Aires pero más sucia, debería ser suficiente con eso



A Washington fuimos en tren, nuevo medio de transporte que probé allí y que valió la pena, no es barato pero funciona perfecto y te consume menos tiempo de estación que un avión low cost que costaba lo mismo pero con la ida y vuelta de aeropuertos (que no es barato) más el tiempo previo, el despacho, etc. Para dos personas con valijas lo mejor fue el tren, apenas unos minutos antes, elegí mi asiento, tuve Internet todo el trayecto, todo perfecto y la estación estaba a dos cuadras del hotel.



La ciudad es la capital de los EEUU así que está llena de edificios gubernamentales, amplias calles, mucha estructura, museos enormes y gratuitos, la Casa Blanca, el Capitolio y... homeless, mucha gente en la calle viviendo como puede. Es un contraste muy particular de el distrito con mayor ingresos del país pero con los pobres ahí por todas partes. No son agresivos ni nada, piden mucho, la gente les da, pero se nota la deuda que tienen para tratar a gente en la calle y cómo estan olvidados completamente.



Más allá de eso los museos fueron lo fuerte, nos llovió muchísimo pero adentro de un museo eso no importa, el Smithsonian obviamente es el lugar perfecto, mucha gente pero valió la pena y lo más importante fue irnos hasta la segunda parte del Museo del Aire y el Espacio que está a la altura del aeropuerto (re lejos pero en colectivo se llega) y donde encontré el sueño del pibe, desde un SR-71 hasta un transbordador espacial, un F-35, aviones de toda era, básicamente el mejor nardo-museo que podía visitar (el de Munich es más nardo en general pero no tiene tantos aviones).



De ahí saltamos a Boston en avión, usamos Jet Blue, me sorprendió porque era cómodo y todo (espacio entre asientos, un diez) y salió todo perfecto aunque el huracán Florence se nos acercaba (de ahí las lluvias) y se nos atrasó un poco el vuelo. En Boston el coletazo del huracán también estaba molestando (básicamente toda nuestro primer tercio de viaje fue con sus consecuencias antes de tocar tierra).



Boston me gustó aunque me dejó gusto a poco, muy recomendada por muchos me sorprendió que no valiera tanto la pena. Si, ya se, que el MIT, Hardvard, que la historia, bla bla bla, está bueno y no lo niego, pero el tema "histórico" es tan flojo como su puesta en escena "armada" para el público local. Qué se yo, odio compararlo con algo con más sustento pero es re floja y muy artificial toda la "historia" de la revolución como está armada y no me la fumé mucho. Eso es, obviamente, totalmente subjetivo.

Sí visité hasta el USS Constitution y los puntos de interés que me hacían reír por haber jugado antes el Fallout 4 y acordarme de los detalles, si el orden hubiese sido inverso seguramente hubiese entendido más los detalles del juego ahora quiero volver a jugarlo! Y hasta me encontré con carteles de refugios nucleares



También pasé por el MIT, visita recomendada, es una universidad y estan los estuadiantes ahí, pero sin pedir permiso te podés mandar igual. Importante: el museo del MIT es la mayor estafa, evítenlo, fui por recomendación y fue la mayor pérdidad de tiempo y dinero de mi vida (bueno, tal vez exagero un poco).

Aquí empezó otra modalidad de viaje: auto. Ultimamente venimos haciendo cosas así, cortar el viaje en distintos "modos", uno en típico turista, otro en modo aventura, modo casero, y así, está bueno porque son como varios viajes en uno, manejar te lleva a recorrer todo distinto y el camino nos llevó por New Hampshire y Vermont, en medio de todo eso, que es el campo prácticamente, bosque y nada más, pasamos por Concord, capital de NH, un pueblo chiquito y con buena gente que si bien es capital es un pueblo bien pueblo. La del mercado nos saludó y dio charla re alegre, lo opuesto a las ciudades, algo normal allá también.



Luego pasé por un lugar que había marcado en el mapa, era más o menos el centro geográfico para descansar, pero tenía algo especial: Worthy Burger. Así se llamaba una hamburguesería en el medio de la más absoluta nada, una estación de tren abandonada, un pueblo ínfimo que tiene una universidad de derecho en medio del bosque, porque tampoco que Vermont sea muy grande en población

Allí comimos una riquísima hamburguesa y no creo que muchos argentinos la tengan en su mapa, pero bueno, me di el gustito luego de meses de hacer dieta ¡Me lo merecía!



De allí metimos pata hasta Montreal, paso de frontera y llegar a lo de nuestros amigos que nos recibieron con una riquísima cena y un vino acorde, pasamos del inglés al francés y de lo americano a lo canadiense/europeo, porque Québec es así, bastante francés todo (además del idioma).



Canadá me encantó, debo admitir que me sorprendió para bien, es un país hermoso y con muy buena onda, obviamente era verano así que no esperen tormentas de nieve, hacían 30 grados y el cielo despejado y soleado era más pampeano que otra cosa. El mito de que viven en un bosque o en una cueva por la nieve escondiéndose de los osos, nah, nada que ver. Paseamos por Québec City y por Mont Tremblant (que es un centro de esquí en invierno pero lugar turístico en verano también), comimos asado con chorizo y entraña y hasta cociné una tortilla de papa porque sí



Luego nos depedimos de ellos para seguir hacia Ottawa, la capital del país, y de allí hasta Toronto. La ciudad bien gracias, casi no la conocí porque tampoco iba a estar muchos días y porque el booking que contraté estaba como a 20 minutos del centro si tenías suerte con el tráfico (el auto metételo en el trasero si querés entrar a la ciudad de día) pero fui de noche y estaba bueno, ya era ciudad grande, no tan linda como las anteriores, más mugrienta pero no tanto como NYC (subir a la torre es ridículamente caro y no vale la pena gastarla toda en eso).



Era el cumpleaños de Gimena y nos fuimos hasta Niagara Falls, el pueblo del lado canadiense que tiene TODA la mejor vista de las cataratas, del lado nortemaricano es la tristeza total, no ven nada, la posta está del lado canadiense, la pega es que, como yo, tenés que sacar la Visa canadiense para poder visitar el país.

Hicimos hasta la excursión en barco donde nos bañó la catarata, es realmente impresionante, estás debajo recibiendo la espuma rodeado de paredes enormes de agua cayendo con fuerza descomunal, vale la pena.



Al otro día comenzamos el retorno a EEUU, pasamos la frontera y comenzamos otro camino rural que, gracias a no hacerle caso al GPS, nos permitió meternos en lugares de Quakeros como Seneca Falls que es el lugar donde comenzó el movimiento feminista en los EEUU durante el siglo XIX (por mujeres quakeras curiosamente que vivían en una sociedad bastante igualitaria en aquellos tiempos) hasta pasar por el lago Cayuga y la ciudad de Ithaca que tiene una universidad importante para llegar luego al desconocido Binghamton donde íbamos a dormir en una casita divina atendida por dos viejitos buena onda (si, suena creepy pero nuestros órganos siguen en su lugar).



Al día siguiente tramo largo hasta NYC, pasamos del estado de New York a Pennsylvania y luego New Jersey y entrando a Manhattan por el famoso puente Lincoln que fue un dolor de huevo enorme por el tráfico (y si, no esperaba menos) en ese horario y hasta me di el gusto de manejar por las calles neoyorkinas: Yankees, tengo experiencia en ciudades de mierda, vivo en Buenos Aires, a mi no me meten la trompa, la trompa la meto yo jejeje, igual tardé una hora en hacer 20 cuadras más o menos



Ahí dejé el auto y empezó la tercer etapa, más clásica, el New York clásico, sacás una MetroCard por siete días y te manejás en subte (algunos osados gustan del colectivo), y caminar, caminar fuerte, 15km diarios, como mínimo.

Volví a visitar el MET y el MOMA, fui a la One World, visité a un amigo (Santi) en Brooklyn, comí porquerías en esos puestos árabes donde cocina un latino ilegal (mis hermanos! siempre ubico al que habla español para tratarlo bien porque allá no los tratan muy bien), fui a los parques, caminé aquí, caminé allá, me cansé para la mierda, etc.



Fuimos al barrio italiano porque era la fiesta de San Gennaro (el patrono de Sicilia) y pude pedirme un conito de rabas en italiano, porque para qué mierda lo estudié durante dos años! igual hablo casi nada porque sigo siendo un desastre en todo lo que hago

Obviamente hice compras como corresponde y al volver justo avisaron que uno se podía comprar una notebook y celular sin problemas, al pedo, en aduana igual me quisieron revisar pero ni siquiera había pasado la franquicia en lo electrónico que traje. Sí, todavía los empleados de aduana siguen así de rancios.



Y aquí llegué, ahora a hacerme cargo de mil y un quilombos porque las vacaciones tienen eso, todo se cae a pedazos aunque en realidad no, todo debería esperar pero no te esperan, quieren que hagas lo que no hiciste en tu ausencia jejeje vamos, a todos nos pasa así que no hay misterio ni nada especial ahí, a arremangarme y laburar.

A todo esto, este mes de Octubre (hoy es mi 8vo aniversario de casado! Felicidades Gime!) es el cumpleaños del blog y si bien no habrá fiesta de nada habrá rediseño del blog. Oh si, cambiará todo, tengo 20 días para terminar no sólo el rediseño sino la funcionalidad, testearlo, fixear mil bugs y todo eso, creo que mi tiempo libre ya no es libre, jeje.