¡Qué loco! Y hace dudar en la reencarnación o que en los animales también hay enfermos que les gusta el combate.
Menos mal que terminó bien. Me habría entristecido que la hubieran feteado después de todo lo que pasó.
El Sargento Reckless
No estoy hablando de un soldado normal estoy hablando de un caballo, una yegua, así es, condecorado y todo, alcanzando el grado de "Staff Sergeant" y habiendo servido en el frente de combate sin demasiados problemas ni preocupaciones.
Era conocido no sólo por su independencia sino por su tendencia a comer absolutamente todo lo que se le cruzaba incluyendo huevos revueltos, cerveza, coca cola y en una ocasión fichas de poker. Con ustedes el sargento menos correcto de todos: Reckless.
En plena guerra de Corea los marines necesitaban un caballo y un joven coreano necesitaba comprarle una pierna artificial a su hermana que había pisado una mina antipersonal, tenía un caballo de carreras en Seul y con USD 250 el teniente Eric Pedersen y los marines de su pelotón sumaban un nuevo caballo, pequeño, pero fuerte de raza mongol.
El pelotón utilizaba los pequeños cañones sin retroceso (Recoilless) y de ahí un poco su nombre Reckless que de paso se traduce literalmente como "temerario", descripción que recibían todos los marines que utilizaban estos cañones en el frente. Rápidamente fue adoptada por el pelotón y todos se hicieron cargo de su nueva amiga, hasta una esposa envió una montura desde Texas para que pudiera trabajar cargando los cañones.
La entrenaron para evitar quedar atrapado en alambrados de púas y para recostarse ante el fuego enemigo y no ser un blanco fácil, su baja estatura también ayudaba, ante un grito de "incoming!" corría rápidamente hacia el bunker más cercano. Tan buena onda tenía con los soldados que en vez de pastar por el exterior del campamento empezó a hacerlo por dentro, a entrar a las tiendas de campaña, a dormir en ellas en las noches de frío, comer cualquier cosa que le daban y, como mencioné anteriormente, hasta beber la misma cerveza de los militares.
Incluía en su dieta cholocate, bacon, manteca de maní, tostadas, papas, caramelos, manteca y todo aquello que un caballo jamás debería comer, en un punto su capitán tuvo que ordenarles que no le diesen más de dos botellas de Coca-Cola por día, además de comida solía comerse cualquier otra cosa menos municiones.
Su bautizmo de fuego la encontró de un susto ante el primer disparo del Recoiless Rifle del pelotón, su cuidador la calmó, para el segundo disparo sólo resopló un poco, había entendido que no era para asustarse y que era su propia arma, como su trabajo era llevar los casquetes con municiones (su función durante la batalla) era llevada por un cuidador un par de veces en cada ruta pero las aprendía rápidamente y las transitaba sola en plena batalla sin guía alguna.
Durante la batalla de Panmunjom-Vegas realizó 51 viajes en solitario en un sólo día cargando un total de 386 municiones, unos 4500 kilos, cubriendo 50 kilómetros, la batalla duró tres días y fue herida dos veces. Por su excelente trabajo durante la operación la ascendieron a "cabo"
También solía realizar tendidos de cables telefónicos entre trincheras haciendo el trabajo de doce hombres ella sola.
Cuando su pelotón se movió de Camp Casey a Inchon fue el primer caballo en participar en una acción anfibia pero casi no se lo permiten en el puerto y, para colmo, en el mar se mareó y descompuso (era un caballo!) pero logró acostumbrarse al movimiento.
Luego del final de la guerra el comandante de la primera división de marines, Randolph M. Pate, condecoró y ascendió a Reckless al rango de sargento, con toda la pompa y ceremonia correspondiente, en Abril de 1954, para 1959 la promovieron a Staff Sergeant (es el rango que viene abajo de Sargento de Primera en los rangos de EEUU, E-6, en nuestro país sería simplemente Sargento).
I was surprised at her beauty and intelligence, and believe it or not, her esprit de corps. Like any other Marine, she was enjoying a bottle of beer with her comrades. She was constantly the center of attraction and was fully aware of her importance. If she failed to receive the attention she felt her due, she would deliberately walk into a group of Marines and, in effect, enter the conversation. It was obvious the Marines loved her.
—Lieutenant General Randolph McC. Pate
Como es de esperar su destino iba a ser "confuso" (AKA mortadela) salvo porque en EEUU se enteraron que era 1954, la guerra había terminado, y Reckless seguía en Corea! el The Saturday Evening Post publicó una nota al respecto y se organizó el transporte entre muchos para lograr su "repatriación" (aunque era coreana, pero qué importaba). La aduana no fue problema pero sí el Departamento de Agricultura que insistió con chequeos médicos en San Francisco.
Cuando llegó el momento de desembarcar se había comido su propia silla de montar pero rápidamente le tenían otra preparada para aparecer en público, lo hizo de la mano del teniente Pedersen el mismísimo 10 de noviembre de 1954, día de los Marines, llena de flores, decoraciones y una torta que obviamente se comió (si, las flores y las decoraciones también).
Apareció en público en muchas ocasiones, hasta en TV, se perdió el "The Ed Sullivan Show" por el tiempo pre desembarco, en su vida post guerra tuvo cuatro crías, y vivió en los cuarteles Camp Pendleton de los marines, se retiró "con honores" en 1960 hasta que en 1968, ya enferma con artritis en su columna, se enganchó en unos alambres de púas. Mientras la curaban, sedada, falleció.
Hoy la recuerda una gran estatua en el Semper Fidelis Memorial Park del National Museum of the Marine Corps y una réplica en Camp Pendleton.
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Comentarios
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Que buena historia, me gusta conocer historias de animales que se han destacado. El humano le debe tanto al caballo(Equus ferus caballus) que todo el mundo debería ponerse de acuerdo para conmemorar su existencia.