Genial recompilación!!
Sería mortal poder ver la cara del instructor cuando el alumno le aterrizó el avión con una sola ala...
Mirá mamá, ¡vuelo sin alas!
Volar sin alas cuando deberías es todo un tema, diría que casi imposible pero no, por suerte no lo es. Si bien la aerodinamia y la simetría son cuestiones claves en una aeronave, en algunas ocasiones más de un piloto tuvo que enfrentarse al hecho de pilotar sin un ala completa o simplemente careciendo de superficies de control en absoluto.
Ahora bien, pilotar sin alas no es nada fácil pero es un caso que se dio más de una vez, un caso ejemplo es el del Vought F-8 Crusader, un caza supersónico de la armada norteamericana que plegaba sus alas para ocupar menos espacio en los portaaviones.
El tema es que en los años 60 dichos aviones no eran precisamente seguros, el F-8 tenía un lindo record de accidentes, y como pueden ver en mi compilado de accidentes en portaaviones, más de una vez era implacable en los aterrizajes... implacable con los pilotos, claro.
La historia en cuestión se dio un día en plena Guerra de Vietnam en la base de Da Nang, entre 1966 y 1967 se dieron un par de estos casos, el piloto estaba recorriendo la pista y ante una seña mal entendida encendió los motores al máximo hasta el postquemador, pero claro, ¡se había olvidado de desplegar las alas completamente! Algo que en un portaaviones se chequea mil veces pero aquí, en tierra, pasaron por alto...
El piloto logró despegar y ante la mirada atónita de todos logró pilotar el F-8 con lo poco de ala que tenía disponible, un poco más duro de lo habitual para los controles, pero todavía "manejable", la foto tomada por el fotógrafo de la marina George Lord del VMF 235, que encabeza este post, es genial. Pudo aterrizarlo luego de lanzar sus bombas y liberar peso.
Un año antes otro piloto se las vio feas en una noche lluviosa, había colapsado las alas para poder pasar cerca de un 707 de PanAm y se olvidó de desplegarlas luego, despegó con una lluvia torrencial, para colmo con todas las luces encendidas el avión parecía un árbol de navidad ya que las luces de las alas estaban en una posición poco ortodoxa.
Entre la lluvia, las luces, la falta de control y todo logró aterrizar... con dos bombas de mil kilos a cada lado, habiendo olvidado lanzarlas, si, se posó sobre las bombas y ninguna explotó, por suerte, claro, el piloto terminó con vértebras fracturadas y principalmente un doloroso desgarro allí donde más podría doler uno.
Pero a veces no se da por error del piloto, al menos no de desplegar alas, esto le pasó a un F-15 israelí que en vez de olvido fue accidente violento sobre el desierto de Negev durante una práctica de combate.
El piloto Zivi Nedivi, que estaba aprendiendo y volaba con su instructor, chocó en plena maniobra con un A-4 Skyhawk, el piloto logró ver la llamarada del otro y sintió el "tirón", desde ese momento notó que los controles no eran los mismos y que tenía un problema importante. El piloto del A-4 se eyectó sin problemas pero ahora Nedivi tenía problemas mayores cuando su F-15 entró en una leve barrena en espiral.
Antes de eyectarse probó acelerando y notó que recuperaba el control, así que decidió probar suerte y tratar de aterrizarlo, logró hacerlo al doble de la velocidad normal para un F-15 pero al darse vuelta para saludarse con su instructor notó el problema que había tenido... ¡Le faltaba toda el ala derecha!
La potencia de los motores del avión lo habían salvado del desastre, eso y la forma aerodinámica del fuselaje le dieron la sustentación y control que le faltaban, aquí video del mismo piloto explicando lo que vivió:
No es recomendable volar sin alas
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Comentarios
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Lo que es increíble es que lograra un mínimo de sustentanción durante el aterrizaje, al bajar la velocidad. Huevos de acero o un loco el pibe...