Superhidroaviones de otra época

04/06/2012 - 01:49:01 por Fabio Baccaglioni - 9037 - 8 - En Historia

Los años 30 fueron una época hermosa para los hidroaviones, hoy por hoy abandonados plenamente, al menos para el transporte a gran escala, y sólo teniendo sentido en algunas islas tropicales donde el agua es tranquila y no se mueve mucha gente pero la velocidad ayuda.

Pero hace más de 80 años la cuestión era sencilla: no había forma de cruzar el océano fácilmente ni menos de un tirón, había que hacer escalas pero, lamentablemente, el Océano Atlántico no ofrece muchas islas, si algunas (las Azores), pero imaginate que tengas una falla en un avión de los años 20/30 y te quiero ver.

El primer hidroavión en cruzar de esta manera fue un Curtiss NC-4 en 1919 pero poco tiempo les duró el record ya que Alcock y Brown cruzaron el océano sin escalas en un bombardero modificado al poco tiempo llevándose los laureles. Todavía no era un cruce real, iban por el norte haciendo la ruta más corta posible, de Irlanda a Newfoundland, para el primer cruce atlántico serio hubo que esperar hasta 1927 de manos de Charles Lindbergh conectando New York con París

Todos los records muy bonitos pero sólo viajaba un aventurero ¿cómo volaban de turismo? aquí algunos de los aviones que más me gustan de esa época...

Sin cruzar el océano, cosa que pudieron unos pocos, hubo uno que se usó en nuestro país, el Supermarine Southampton, lo usaban para cruzar el canal de la Mancha y le fue bastante bien comercialmente, aunque apenas llevaba 10 personas en esos viajes cortos.



El Short S.8 Calcutta en cambio ya lograba 1000 km de alcance, una enormidad para 1928 y lo bueno es que podía conectar Inglaterra con la India, algo que necesitaban mucho los ingleses. Los vuelos iban por el Mediterráneo, a Pakistán y luego la India. Llevaba 15 personas y para tal ruta era un lujo.



Uno de los más exitosos hidroaviones fue el Dornier Do J, los españoles supieron sacarle provecho, no era para muchos pasajeros, pero Roald Amundsen se las ingenió para tratar de llegar al polo norte con dos de estos, uno se rompió y tuvieron que aterrizar, cortar 600 toneladas de hielo y despegar con la tripulación de los dos en uno solo, casi ni despegan y lograron llegar.

Se usó mucho como correo entre Europa y Sudamérica, cruzando por Fernando de Noronha, haciendo el paso más corto entre África y América. Ramón Franco utilizó este avión con el nombre de "Plus Ultra" (está en Luján por si quieren verlo ) para unir Palos de la Frontera, en Huelva, y Buenos Aires en 59 horas y 39 minutos, 10270km, en 1926.

Los años 30 sumaron aviones geniales, el Sikorsky S-42, cuando todavía no se dedicaban exclusivamente a helicópteros, diseñado entre Igor Sikorsky y el mismísimo Lindbergh con la idea de lograr 4000 kilḿetros sin reabastecimiento y con un viento de 50km/h en contra. Pan Am lo operaba bajo el nombre de Clipper. Hacía rutas como San Francisco - Hawaii y New York - Bermuda, vía Hawaii se lo conectó con China.



Este era la competencia del Martin M-130 que también buscaba conectar EEUU con Hong Kong y las Filipinas.

Creo que sin dudas el Dornier Do X es el mejor y, de hecho, fue el motivo de este post, rememorarlo, porque era una bestia, literalmente, porque no era un bimotor ni un cuatrimotor, era un hidroavión con 12 motores en 6 tandem de a 2, un alcance de 1700km y una velocidad máxima de 200km/h, no es una maravilla de velocidad ni alcance, pero fue el primer avión en 1929 en volar con 150 personas!!! un récord para la época, a duras penas se elevó en ese vuelo, pero demostró que podía.



En 1930 quisieron mostrarlo en los EEUU así que hizo todo un viaje, saliendo desde Holanda, luego Inglaterra, Francia, España, Portugal, Cabo Verde y luego cruzó a Brasil para seguir la costa hacia el norte hasta New York. El vuelo estuvo lleno de problemas, tuvieron que cambiar motores en New York por lo que estuvo en el actual aeropuerto de La Guarda durante meses, en 1932 volvió por el norte vía Newfoundland hasta europa y en Alemania lo recibieron 200.000 personas.

Lufthansa lo utilizó para unir Viena, Istanbul y Budapest pero fue destruido en la segunda guerra mundial por un bombardeo aliado. Los italianos por su parte construyeron el X2 y el X3.



Los años siguientes, a fines de los años 30, el diseño cambió notablemente, ya más parecidos a los que vimos en la segunda guerra, el carenado, la forma, la aerodinamia y la hidrodinamia, casos como el Short S.26 con una capacidad de 38 pasajeros y un alcance de 5152km dejó en claro en 1939 que lo de hidroavión era ya poco necesario, sólo servía cuando no había pistas posibles porque podía cruzar el atlántico sin repostar.



El Boeing 314 Clipper con 5800 kilómetros de alcance y hasta 74 pasajeros, podía cruzar el Atlántico o el Pacífico y fue la base del diseño de muchos bombarderos estratégicos en los años siguientes porque ahí no más comenzó la guerra.



También otro famoso fue el Short Sunderland de 1938 que utilizó Aerolíneas Argentinas, pero claro, era ya mucho más moderno.



La guerra trajo a la fama al PBY Catalina y tantos otros para rescate de pilotos caídos o tripulación de barcos hundidos.



Pero si de esa guerra quieren un hidroavión grande en serio, el Blohm & Voss BV 238 fue el avión más grande utilizado por las fuerzas nazis, confundible con el concepto del "Amerika Bomber" ya que su alcance de 6620 km podría haber servido.



La época dorada de los hidroaviones había terminado, el Hércules H-4 de Howard Hughes fue la última bestia de mar, llegó tarde, 1947 era la era del cruce en un sólo tramo con pasajeros, tenía 97 metros de envergadura, pesaba 180 toneladas, ocho motores de 4000hp cada uno, pero ya no tenía sentido.



El último de esta generación perdida de enormes hidroaviones de pasajeros fue el Saunders-Roe Princess de 1952, si, en pleno comienzo de la era del jet uno que todavía intentaba llegar a todos lados por aire y mar, pero los aeropuertos ya eran lo suficientemente comunes y modernos como para ser innecesario.

Diez motores turbohélice, 9205 km de autonomía, una velocidad de 610km/h y capacidad para 105 pasajeros. Para la época fabuloso, pero un avión a 800km/h que no necesite de un puerto era mucho mejor que un hidroavión que no tenía tantos lugares donde acuatizar. La era romántica del hidroavión había terminado.