Cuentos para días de lluvia IV



Como en Buenos Aires está pronosticado lluvia para todo el fin de semana les dejo un cuento acorde y estremecedor (hasta el c***) del autor de El Club de la Pelea.

Tomen Aire.






Tripas

Por Chuck Palahniuk



Tomen aire.

Tomen tanto aire como puedan. Esta historia debería durar el tiempo que logren retener el aliento, y después un poco más. Así que escuchen tan rápido como les sea posible.

Cuando tenía trece años, un amigo mío escuchó hablar del “pegging”. Esto es cuando a un tipo le meten un pito por el culo. Si se estimula la próstata lo suficientemente fuerte, el rumor dice que se logran explosivos orgasmos sin manos. A esa edad, este amigo es un pequeño maníaco sexual. Siempre está buscando una manera mejor de estar al palo. Se va a comprar una zanahoria y un poco de jalea para llevar a cabo una pequeña investigación personal. Después se imagina cómo se va a ver la situación en la caja del supermercado, la zanahoria solitaria y la jalea moviéndose sobre la cinta de goma. Todos los empleados en fila, observando. Todos viendo la gran noche que ha planeado.

Entonces mi amigo compra leche y huevos y azúcar y una zanahoria, todos los ingredientes para una tarta de zanahorias. Y vaselina.

Como si se fuera a casa a meterse una tarta de zanahorias por el culo.

En casa, talla la zanahoria hasta convertirla en una contundente herramienta. La unta con grasa y se la mete en el culo. Entonces, nada. Ningún orgasmo. Nada pasa, salvo que duele.

Entonces la madre del chico grita que es hora de la cena. Le dice que baje inmediatamente.

El se saca la zanahoria y entierra esa cosa resbaladiza y mugrienta entre la ropa sucia debajo de su cama.

Después de la cena va a buscar la zanahoria, pero ya no está allí. Mientras cenaba, su madre juntó toda la ropa sucia para lavarla. De ninguna manera podía encontrar la zanahoria, cuidadosamente tallada con un cuchillo de su cocina, todavía brillante de lubricante y apestosa.

Mi amigo espera meses bajo una nube oscura, esperando que sus padres lo confronten. Y nunca lo hacen. Nunca. Incluso ahora, que ha crecido, esa zanahoria invisible cuelga sobre cada cena de Navidad, cada fiesta de cumpleaños. Cada búsqueda de huevos de Pascua con sus hijos, los nietos de sus padres, esa zanahoria fantasma se cierne sobre ellos. Ese algo demasiado espantoso para ser nombrado.

Los franceses tienen una frase: “ingenio de escalera”. En francés, esprit de l’escalier. Se refiere a ese momento en que uno encuentra la respuesta, pero es demasiado tarde. Digamos que usted está en una fiesta y alguien lo insulta. Bajo presión, con todos mirando, usted dice algo tonto. Pero cuando se va de la fiesta, cuando baja la escalera, entonces, la magia. A usted se le ocurre la frase perfecta que debería haber dicho. La perfecta réplica humillante. Ese es el espíritu de la escalera.

El problema es que los franceses no tienen una definición para las cosas estúpidas que uno realmente dice cuando está bajo presión. Esas cosas estúpidas y desesperadas que uno en verdad piensa o hace.

Algunas bajezas no tienen nombre. De algunas bajezas ni siquiera se puede hablar.

Mirando atrás, muchos psiquiatras expertos en jóvenes y psicopedagogos ahora dicen que el último pico en la ola de suicidios adolescentes era de chicos que trataban de asfixiarse mientras se masturbaban. Sus padres los encontraban, una toalla alrededor del cuello, atada al ropero de la habitación, el chico muerto. Esperma por todas partes. Por supuesto, los padres limpiaban todo. Le ponían pantalones al chico. Hacían que se viera... mejor. Intencional, al menos. Un típico triste suicidio adolescente.

Otro amigo mío, un chico de la escuela con su hermano mayor en la Marina, contaba que los tipos en Medio Oriente se masturban distinto a como lo hacemos nosotros. Su hermano estaba estacionado en un país de camellos donde los mercados públicos venden lo que podrían ser elegantes cortapapeles. Cada herramienta es una delgada vara de plata lustrada o latón, quizá tan larga como una mano, con una gran punta, a veces una gran bola de metal o el tipo de mango refinado que se puede encontrar en una espada. Este hermano en la Marina decía que los árabes se ponen al palo y después se insertan esta vara de metal dentro de todo el largo de su erección. Y se masturban con la vara adentro, y eso hace que masturbarse sea mucho mejor. Más intenso.

Es el tipo de hermano mayor que viaja por el mundo y manda a casa dichos franceses, dichos rusos, útiles sugerencias para masturbarse. Después de esto, un día el hermano menor falta a la escuela. Esa noche llama para pedirme que le lleve los deberes de las próximas semanas. Porque está en el hospital.

Tiene que compartir la habitación con viejos que se atienden por sus tripas. Dice que todos tienen que compartir la misma televisión. Su única privacidad es una cortina. Sus padres no lo visitan. Por teléfono, dice que sus padres ahora mismo podrían matar al hermano mayor que está en la Marina.

También dice que el día anterior estaba un poco drogado. En casa, en su habitación, estaba tirado en la cama, con una vela encendida y hojeando revistas porno, preparado para masturbarse. Todo esto después de escuchar la historia del hermano en la Marina. Esa referencia útil acerca de cómo se masturban los árabes. El chico mira alrededor para encontrar algo que podría ayudarlo. Un bolígrafo es demasiado grande. Un lápiz, demasiado grande y duro. Pero cuando la punta de la vela gotea, se logra una delgada y suave arista de cera. La frota y la moldea entre las palmas de sus manos. Larga y suave y delgada.

Drogado y caliente, se la introduce dentro, más y más profundo en la uretra. Con un gran resto de cera todavía asomándose, se pone a trabajar.

Aun ahora, dice que los árabes son muy astutos. Que reinventaron por completo la masturbación. Acostado en la cama, la cosa se pone tan buena que el chico no puede controlar el camino de la cera. Está a punto de lograrlo cuando la cera ya no se asoma fuera de su erección.

La delgada vara de cera se ha quedado dentro. Por completo. Tan adentro que no puede sentir su presencia en la uretra.

Desde abajo, su madre grita que es hora de la cena. Dice que tiene que bajar de inmediato. El chico de la cera y el chico de la zanahoria son personas diferentes, pero tienen vidas muy parecidas.

Después de la cena, al chico le empiezan a doler las tripas. Es cera, así que se imagina que se derretirá adentro y la meará. Ahora le duele la espalda. Los riñones. No puede pararse derecho.

El chico está hablando por teléfono desde su cama de hospital, y de fondo se pueden escuchar campanadas y gente gritando. Programas de juegos en televisión.

Las radiografías muestran la verdad, algo largo y delgado, doblado dentro de su vejiga. Esta larga y delgada V dentro suyo está almacenando todos los minerales de su orina. Se está poniendo más grande y dura, cubierta con cristales de calcio, golpea y desgarra las suaves paredes de su vejiga, obturando la salida de su orina. Sus riñones están trabados. Lo poco que gotea de su pene está rojo de sangre.

El chico y sus padres, toda la familia mirando las radiografías con el médico y las enfermeras parados allí, la gran V de cera brillando para que todos la vean: tiene que decir la verdad. La forma en que se masturban los árabes. Lo que le escribió su hermano en la Marina. En el teléfono, ahora, se pone a llorar.

Pagaron la operación de vejiga con el dinero ahorrado para la universidad. Un error estúpido, y ahora jamás será abogado. Meterse cosas adentro. Meterse dentro de cosas. Una vela en la pija o la cabeza en una horca, sabíamos que serían problemas grandes.

A lo que me metió en problemas a mí lo llamo “Bucear por perlas”. Esto significaba masturbarse bajo el agua, sentado en el fondo de la profunda piscina de mis padres. Respiraba hondo, con una patada me iba al fondo y me deshacía de mis shorts. Me quedaba sentado en el fondo dos, tres, cuatro minutos.

Sólo por masturbarme tenía una gran capacidad pulmonar. Si hubiera tenido una casa para mí solo, lo habría hecho durante tardes enteras.

Cuando finalmente terminaba de bombear, el esperma colgaba sobre mí en grandes gordos globos lechosos.

Después había más buceo, para recolectarla y limpiar cada resto con una toalla. Por eso se llamaba “bucear por perlas”. Aun con el cloro, me preocupaba mi hermana. O, por Dios, mi madre.

Ese solía ser mi mayor miedo en el mundo: que mi hermana adolescente virgen pensara que estaba engordando y diera a luz a un bebé de dos cabezas retardado. Las dos cabezas me mirarían a mí. A mí, el padre y el tío. Pero al final, lo que te preocupa nunca es lo que te atrapa.

La mejor parte de bucear por perlas era el tubo para el filtro de la pileta y la bomba de circulación. La mejor parte era desnudarse y sentarse allí.

Como dicen los franceses, ¿a quién no le gusta que le chupen el culo? De todos modos, en un minuto se pasa de ser un chico masturbándose a un chico que nunca será abogado.

En un minuto estoy acomodado en el fondo de la piscina, y el cielo ondula, celeste, através de un metro y medio de agua sobre mi cabeza. El mundo está silencioso salvo por el latido del corazón en mis oídos. Los shorts amarillos están alrededor de mi cuello por seguridad, por si aparece un amigo, un vecino o cualquiera preguntando por qué falté al entrenamiento de fútbol. Siento la continua chupada del tubo de la pileta, y estoy meneando mi culo blanco y flaco sobre esa sensación. Tengo aire suficiente y la pija en la mano. Mis padres se fueron a trabajar y mi hermana tiene clase de ballet. Se supone que no habrá nadie en casa durante horas.

Mi mano me lleva casi al punto de acabar, y paro. Nado hacia la superficie para tomar aire. Vuelvo a bajar y me siento en el fondo. Hago esto una y otra vez.

Debe ser por esto que las chicas quieren sentarse sobre tu cara. La succión es como una descarga que nunca se detiene. Con la pija dura, mientras me chupan el culo, no necesito aire. El corazón late en los oídos, me quedo abajo hasta que brillantes estrellas de luz se deslizan alrededor de mis ojos. Mis piernas estiradas, la parte de atrás de las rodillas rozando fuerte el fondo de concreto. Los dedos de los pies se vuelven azules, los dedos de los pies y las manos arrugados por estar tanto tiempo en el agua.

Y después dejo que suceda. Los grandes globos blancos se sueltan. Las perlas. Entonces necesito aire. Pero cuando intento dar una patada para elevarme, no puedo. No puedo sacar los pies. Mi culo está atrapado.

Los paramédicos de emergencias dirán que cada año cerca de 150 personas se quedan atascadas de este modo, chupadas por la bomba de circulación. Queda atrapado el pelo largo, o el culo, y se ahoga. Cada año, cantidad de gente se ahoga. La mayoría en Florida.

Sólo que la gente no habla del tema. Ni siquiera los franceses hablan acerca de todo. Con una rodilla arriba y un pie debajo de mi cuerpo, logro medio incorporarme cuando siento el tirón en mi culo. Con el pie pateo el fondo. Me estoy liberando pero al no tocar el concreto tampoco llego al aire. Todavía pateando bajo el agua, revoleando los brazos, estoy a medio camino de la superficie pero no llego más arriba. Los latidos en mi cabeza son fuertes y rápidos.

Con chispas de luz brillante cruzando ante mis ojos me doy vuelta para mirar... pero no tiene sentido. Esta soga gruesa, una especie de serpiente azul blancuzca trenzada con venas, ha salido del desagüe y está agarrada a mi culo. Algunas de las venas gotean rojo, sangre roja que parece negra bajo el agua y se desprende de pequeños rasguños en la pálida piel de la serpiente. La sangre se disemina, desaparece en el agua, y bajo la piel delgada azul blancuzca de la serpiente se pueden ver restos de una comida a medio digerir.

Esa es la única forma en que tiene sentido. Algún horrible monstruo marino, una serpiente del mar, algo que nunca vio la luz del día, se ha estado escondido en el oscuro fondo del desagüe de la pileta, y quiere comerme.

Así que la pateo, pateo su piel resbalosa y gomosa y llena de venas, pero cada vez sale más del desagüe. Ahora quizá sea tan larga como mi pierna, pero aún me retiene el culo. Con otra patada estoy a unos dos centímetros de lograr tomar aire. Todavía sintiendo que la serpiente tira de mi culo, estoy a un centímetro de escapar.

Dentro de la serpiente se pueden ver granos de maíz y maníes. Se puede ver una brillante bola anaranjada. Es la vitamina para caballos que mi padre me hace tomar para que gane peso. Para que consiga una beca gracias al fútbol. Con hierro extra y ácidos grasos omega tres. Ver esa pastilla me salva la vida.

No es una serpiente. Es mi largo intestino, mi colon, arrancado de mi cuerpo. Lo que los doctores llaman prolapso. Mis tripas chupadas por el desagüe.

Los paramédicos dirán que una bomba de agua de piscina larga 360 litros de agua por minuto. Eso son unos 200 kilos de presión. El gran problema es que por dentro estamos interconectados. Nuestro culo es sólo la parte final de nuestra boca. Si me suelto, la bomba sigue trabajando, desenredando mis entrañas hasta llegar a mi boca. Imaginen cagar 200 kilos de mierda y podrán apreciar cómo eso puede destrozarte.

Lo que puedo decir es que las entrañas no sienten mucho dolor. No de la misma manera que duele la piel. Los doctores llaman materia fecal a lo que uno digiere. Más arriba es chyme, bolsones de una mugre delgada y corrediza decorada con maíz, maníes y arvejas.

Eso es la sopa de sangre y maíz, mierda y esperma y maníes que flota a mi alrededor. Aún con mis tripas saliendo del culo, conmigo sosteniendo lo que queda, aún entonces mi prioridad era volver a ponerme el short. Dios no permita que mis padres me vean la pija.

Una de mis manos está apretada en un puño alrededor de mi culo, la otra arranca el short amarillo del cuello. Pero ponérmelos es imposible.

Si quieren saber cómo se sienten los intestinos, compren uno de esos condones de piel de cabra. Saquen y desenrrollen uno. Llénenlo con mantequilla de maní, cúbranlo con lubricante y sosténganlo bajo el agua. Después traten de rasgarlo. Traten de abrirlo en dos. Es demasiado duro y gomoso. Es tan resbaladizo que no se puede sostener. Un condón de piel de cabra, eso es un intestino común.

Ven contra lo que estoy luchando.

Si me dejo ir por un segundo, me destripo.

Si nado hacia la superficie para buscar una bocanada de aire, me destripo.

Si no nado, me ahogo.

Es una decisión entre morir ya mismo o dentro de un minuto. Lo que mis padres encontrarán cuando vuelvan del trabajo es un gran feto desnudo, acurrucado sobre sí mismo. Flotando en el agua sucia de la piscina del patio. Sostenido por atrás por una gruesa cuerda de venas y tripas retorcidas. El opuesto de un adolescente que se ahorca cuando se masturba. Este es el bebé que trajeron del hospital trece años atrás. Este es el chico para el que deseaban una beca deportiva y un título universitario. El que los cuidaría cuando fueran viejos. Aquí está el que encarnaba todas sus esperanzas y sueños. Flotando, desnudo y muerto. Todo alrededor, grandes lechosas perlas de esperma desperdiciada.

Eso, o mis padres me encontrarán envuelto en una toalla ensangrentada, desmayado a medio camino entre la piscina y el teléfono de la cocina, mis desgarradas entrañas todavía colgando de la pierna de mis shorts amarillos. Algo de lo que ni los franceses hablarían.

Ese hermano mayor en la Marina nos enseñó otra buena frase. Rusa. Cuando nosotros decimos: “Necesito eso como necesito un agujero en la cabeza”, los rusos dicen: “Necesito eso como necesito un diente en el culo”. Mne eto nado kak zuby v zadnitse. Esas historias sobre cómo los animales capturados por una trampa se mastican su propia pierna; cualquier coyote puede decir que un par de mordiscos son mucho mejores que morir.

Mierda... aunque seas ruso, algún día podrías querer esos dientes. De otra manera, lo que tenés que hacer es retorcerte, dar vueltas. Enganchar un codo detrás de la rodilla y tirar de esa pierna hasta la cara. Morder tu propio culo. Uno se queda sin aire y mordería cualquier cosa con tal de volver a respirar.

No es algo que te gustaría contarle a una chica en la primera cita. No si querés besarla antes de ir a dormir. Si les cuento qué gusto tenía, nunca nunca volverían a comer calamares.

Es difícil decir qué les disgustó más a mis padres: cómo me metí en el problema o cómo me salvé. Después del hospital, mi madre dijo: “No sabías lo que hacías, amor. Estabas en shock”. Y aprendió a cocinar huevos pasados por agua.

Toda esa gente asqueada o que me tiene lástima... la necesito como necesito dientes en el culo.

Hoy en día, la gente me dice que soy demasiado delgado. En las cenas, la gente se queda silenciosa o se enoja cuando no como la carne asada que prepararon. La carne asada me mata. El jamón cocido. Todo lo que se queda en mis entrañas durante más de un par de horas sale siendo todavía comida. Chauchas o atún en lata, me levanto y me los encuentro allí en el inodoro.

Después de sufrir una disección radical de los intestinos, la carne no se digiere muy bien. La mayoría de la gente tiene un metro y medio de intestino grueso. Yo tengo la suerte de conservar mis quince centímetros. Así que nunca obtuve una beca deportiva, ni un título. Mis dos amigos, el chico de la cera y el de la zanahoria, crecieron, se pusieron grandotes, pero yo nunca llegué a pesar un kilo más de lo que pesaba cuando tenía trece años. Otro gran problema es que mis padres pagaron un montón de dinero por esa piscina. Al final mi padre le dijo al tipo de la piscina que fue el perro. El perro de la familia se cayó al agua y se ahogó. El cuerpo muerto quedó atrapado en el desagüe. Aun cuando el tipo que vino a arreglar la piscina abrío el filtro y sacó un tubo gomoso, un aguachento resto de intestino con una gran píldora naranja de vitaminas aún dentro, mi padre sólo dijo: “Ese maldito perro estaba loco”. Desde la ventana de mi pieza en el primer piso podía escuchar a mi papá decir: “No se podía confiar un segundo en ese perro...”.

Después mi hermana tuvo un atraso en su período menstrual.

Aun cuando cambiaron el agua de la pileta, aun después de que vendieron la casa y nos mudamos a otro estado, aun después del aborto de mi hermana, ni siquiera entonces mis padres volvieron a mencionarlo.

Esa es nuestra zanahoria invisible.

Ustedes, tomen aire ahora.

Yo todavía no lo hice.



La nota original en: Pagina 12

¡Y aquí el autor de la zanahoria de la fotito!

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Comentarios

  • Fer     21/10/2005 - 18:43:03

    Cattel pense que habias publicado tu diario....:D:D

  • Adk     21/10/2005 - 18:48:43

    Faa!!! Te pasaste ta weno^^
    (>´-´)>
    Saludos :D

  • dany     21/10/2005 - 18:57:59

    Gracias por alegrarme el dia, jajaja, tenia rato que no me reia tanto con una lectura... que feo caso... supongo que el tipo de la zanahoria fue el que salio mejor librado... :D

  • jorgefx_x     21/10/2005 - 22:32:04

    Nahhh...
    Dejame con la clásica Guiño

    Pero posta, muuuchos hacen cada huevada con su pito...

  • Jose     21/10/2005 - 23:31:48

    Vos sabes que a mi me lo hizo llegar un tipo, y yo digo, no, esto no puede ser, no creia a medida que lo iba leyendo que esto apareciese aca...

    La verdad esta bueno, yo despues de leer eso ya no me voy mas al fondo de la pileta. En cuanto a lo otro, eh....

  • jhony     22/10/2005 - 00:22:06

    Hey Cattelqué cuento de mierda !

  • corinne     22/10/2005 - 00:40:28

    Lo voy a leer el fin de semana.. si llueve. jijiji

  • jhony     22/10/2005 - 01:01:12

    creo que lo vas a leer mas rápido de lo que está soplando el viento en estos momentos donde yo vivo, si vivís en la City dentro de unas horas Guiño

  • Laura     22/10/2005 - 01:03:38

    aca esta empezando a levantarse un vientito de lluvia... piso 13 en la city como le decis vos a baires.

  • jhony     22/10/2005 - 01:12:58

    Acá ya comenzaron los truenos, ajjajajja, encima hay boliche abierto porque mañana veda total por las elecciones :D:D,así que más tarde a salirrrrrrrrrr , no hay nada mas lindo que divertirse

  • Laura     22/10/2005 - 01:16:24

    lleva piloto! Guiño

  • Fer     22/10/2005 - 01:34:58

    y aca no llueve hace cinco meses.....

  • cypher     22/10/2005 - 05:01:03

    Solo espero no soñar con esto.

  • Matías     22/10/2005 - 10:29:47

    Este Chuck Palahniuk... es un enfermo...

  • Matias     22/10/2005 - 10:45:52

    Tiene bastantes problemas...
    En el club de la pelea no se ve "tanto"...

    Se basará en alguna experiencia propia?

  • Laura     22/10/2005 - 15:21:31

    No me gusto. :|

  • Dr. Strangelove     22/10/2005 - 21:52:20

    Caramba... :|

    ese cuento pego duro
    muy buen cuento, el autor se pasa de bueno...

    ahora me interesare mas en buscar info del mismo

  • Agostina CBA     22/10/2005 - 22:38:47

    Llegue a este lugar buscando otras huevadas y me gustó mucho,tanto que me puse a perder tiempo escribiendo esto. MUY BUENO.

  • Liondart     22/10/2005 - 23:47:37

    Dios... Estos yanquis están dementes.

    Argh.

  • Danbat     23/10/2005 - 03:07:33

    ¡Argh! ¡Es un asco! Te maldigo por haber puesto eso, sucia rata de alcantarilla, insensible, degenerada.

    ¡Queremos Adela!:D

  • ylek     23/10/2005 - 11:42:50

    ahora uno de boris vian :D

  • sofi     23/10/2005 - 15:11:49

    ayyy, me hiciste poner nerviosa. Esta terriblemente bueno Guiño

  • Rulo     23/10/2005 - 22:00:13

    Huu este cuento me cambio la vida, ahora entiendo porque mi papá cuando se iba a navegar por el mundo nunca escribia nada y tambien entiendo el porque de nunca poner una piscina, pese que era triste la pelopincho pero me parecen qeu pensaban de antemano en mi salud

  • Elio     24/10/2005 - 11:00:39

    Me hizo acordar a Truman Capote, otro que le gustaban las zanahorias y las succiones traseras. :D

  • Cattel     24/10/2005 - 13:34:27

    Ok,tengo uno de Boris Vian en mente, pero veré si puedo conseguirlo en digital.

    Al final llovió hoy (lunes), pero bueh...

  • Matías     24/10/2005 - 13:51:26

    Por suerte llovió hoy... si no me tenía que ir al colegio sólo para educación física

  • jhony     24/10/2005 - 14:29:20

    Che Cattel te encargo un cuento cuando haya un huracán , creo que ya me lo estoy imaginando.......

  • v4c4     24/10/2005 - 15:02:37

    Aun no puedo creer que sea verdad...Sinceramente es muy duro...demasiado.
    No me gusto! :s

  • Fabio     24/10/2005 - 15:25:53

    "ser verdad" quien dijo que eso era verdad? para mi es un cuento morboso de esos que Cattel postea en mi blog para espantar lectores :D:D jajaja, que hdp, mirá las cosas que te publicás!!! :D

    igualmente me resultó entretenido y divertida la parte de los chinchulines aspirados por el filtro de la pileta, bien morboso eso Guiño

  • jhony     24/10/2005 - 16:16:51

    El que creyó que era de verdad , en el cerebro tiene na "cantera"

  • Ortiga     24/10/2005 - 16:30:12

    Como me gustaria poder escribir asi, con esa imaginación y ese desenfado escatológico.
    Alguien vió o escucho hablar alguna vez de un preservativo de piel de cabra? El Dr. Ahorro se esta zarpando mucho ya...Guiño

  • PENELOPE     25/10/2005 - 11:46:47

    EN HONOR A LA VERDAD EN PRINCIPIO MI SENSIBILIDAD FEMENINA SE REVELÓ, AL FINAL GANÓ EL MORBO POR SABER EL DESENLACE DE LAS AVENTURAS DE ESTE PUBER,AHORA YA TENGO UNA LEYENDA URBANA PARA MIS FAMILIARES ADOLESCENTES, DICHO SEA DE PASO ¡GRACIAS! HACIA BUEN TIEMPO QUE NO REIA TANTO NI DE TAN BUENA GANA.

  • Ortiga     25/10/2005 - 14:05:04

    Porque comemos choclo, masticamos a conciencia, tragamos, digerimos etc. y en el inodoro estan los granos del choclo como sin nunca les hubiera pasado nada?

  • mina     25/10/2005 - 15:16:03

    me mato tu preguntaaaa...ortiga:D:D:D:D
    la verdad es que nunca me habia hecho ese planteo

  • jhony     25/10/2005 - 16:40:55

    Ortiga yo jamás indago lo que deposito en el inodoro. Y menos contar los granos de choclo

  • Danbat     25/10/2005 - 16:54:38

    Estuve pensando (maldito seas, Luis :D) y si mis conocimientos médicos no me fallan el intestino grueso se encarga básicamente de recuperar el agua. El desmenuzamiento de la comida se hace en la boca y estómago. Para cuando llega al intestino delgado (el que hace la mayor parte del trabajo) la comida es básicamente una masa viscosa, verdeamarronada y maloliente (por la bilis). Si bien el estómago absorbe bastante agua, gran parte permanece para circular con facilidad por los intestinos hasta llegar al intestino grueso donde se absorbe y así quedar en la consistencia adecuada para la eliminación por el recto.

    O sea que si al tipo le quedaron 15 cm de intestino grueso a lo sumo será una diarrea constante, pero no por eso tendrá que cuidarse demasiado con la comida. Si algún médico gastroenterólogo pasa por acá y quiere corregir o afirmar, bienvenido sea.

    Y sobre los granos de choclo, lo que no se digiere es la cáscara, que es lo suficientemente resistente para resistir la masticación, el ácido del estómago y las enzimas intestinales. Pasa lo mismo con la cáscara de las lentejas y con buena parte de las legumbres y las fibras vegetales.:D

  • Fabio     25/10/2005 - 17:24:45

    Dan, creo que el 90% de los nutrientes los absorbe el intestino grueso, es decir... si no tenés mucho, mejor que lo poco que queda pueda asimilar lo que ingieras, y si quedan sólo 20cm de grueso, es obvio que quedarás bien flaco toda tu vida :D pero por ahí el autor del cuento la exageró un poco... como durante todo el cuento!!! :D

    ahora bien... ¿se habrá basado en casos reales?

  • jhony     25/10/2005 - 17:36:54

    Tal vez en alguna experiencia propia, o porque es flaco como un palo .Me gustó la conclusión.

  • mina     25/10/2005 - 19:51:22

    Ahhh,gracias Dan,pense que tenia el intestino pinchado y por eso los granitos de choclo andaban dando vueltas:s.

  • MARIANO     26/10/2005 - 00:18:56

    YO NO SE KE PASO CON LA ZANAHORIA. :D

  • dany     26/10/2005 - 23:02:13

    todos tenemos alguna zanahoria invisible rondando las historias de nuestro pasado mariano...

  • jhony     26/10/2005 - 23:32:58

    Ice hola! dale contá esa historia. jamás se me ocurrió "invisible" vaya vaya

  • Laura     26/10/2005 - 23:35:12

    Eso, cuenten historias escatologicas todos!!!!!!

  • jhony     26/10/2005 - 23:41:08

    Pasa que la zanahoria para mi, ( ojo ) digo para mi siempre fue visible. Por eso no puedo contarte nada Lau, demos paso a Ice...

  • Jose Carlos     04/11/2005 - 21:03:00

    <strong></strong>jajajaja estubo largo pero me estoy meando de la risa jajajajajajajaja:D:D:D:D:D:D:D:D:D:D:D:D:D:D

  • fernando     21/09/2006 - 18:46:45

    que bueno, eres de los mejores accidentes que me han ocurrido en la red!

  • madrobyo     19/10/2006 - 11:39:31

    Simplemente una asquerosa genialidad.

  • Anónimo     15/03/2007 - 17:13:00

    <img src><em></em><strong></strong><a href></a>

  • Anónimo     15/03/2007 - 17:13:52


    me gusto che, pero sos un asqerooso

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